El objetivo de la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados es que en 2028 se haya eliminado de forma segura todo el amianto. Por tanto, se deberán promover actuaciones desde el ámbito público y privado, aumentando considerablemente las obras de desamiantado.
Saber actuar correctamente cuando aparece amianto en la obra, es algo casi imprescindible para cualquier técnico interviniente, además de conocer el marco normativo, local, autonómico, nacional y/o internacional de las actuaciones sobre elementos en edificios existentes que contengan amianto.
Conocer los aspectos para el control de riesgo asociado a la manipulación de amianto, sirve también para: diseñar correctamente la ejecución, coordinar las actividades preventivas, de seguridad y asesorar a las empresas intervinientes en la redacción de los planes de seguridad.